El canto del cisne
No había vuelta atrás. Capturó en el espejo la sonrisa, el aliento y el alma que se le escapó por la boca al expirar. Desde entonces vagó por el mundo intentando recomponer los pedazos que le faltaban. El fin justificaba los medios, eso pensaba él, para conseguir crearla de nuevo.
Si él piensa eso, malo, eso es lo qué creo. ¿Asesino en serie?, seguro que acabará así. Se cría que los cisnes cantaban antes de morir mientras habían estado callados durante toda su vida, por lo tanto este relato bien pude ser un homenaje a tantas mujeres asesinadas y que sus ejecutores andan libres todavía. Me ha encantado. Un beso.
ResponderEliminarAunque las intenciones del protagonista sean más románticas e idealistas, el delito sigue existiendo a pesar de todo... ¡faltaría más!
EliminarGracias por tu comentario, Maite, un abrazo.
Hola, Macarena.
ResponderEliminarTexto sugestivo y de no sencilla interpretación. Que alguien muere está claro. Posiblemente una mujer que el asesino descuartiza y luego vaga por el mundo dando muerte a mujeres y tomando pedazos con que volver a crear a la mujer a la que quitó la vida. Y eso a toda costa, sin vuelta de hoja. Quizá exista una interpretación más metafórica, pero no la encuentro por más vueltas que le doy al micro. Coincido, pues, con Maite, que es quien tiene el mérito. Un beso y feliz todo para ti siempre.
La interpretación del lector siempre es bienvenida, Eduardo, aunque se aleje de la intención del escritor, que quizás es el que debe medir y usar las palabras justas para dar el debido sentido a su texto. Gracias por tu comentario y tus deseos de felicidad, que te mando igualmente. Un abrazo.
EliminarEstoy con Maite y Eduardo, me parece un texto muy sugerente; aunque también tengo dificultades para desentrañar su posible significado. Cosa que no hace ninguna falta para disfrutar de tu escritura y de la "sonoridad" de tu relato. Me has gustado. Saludos y suerte, Macarena.
ResponderEliminarJesús, siempre tan amable... gracias por tus palabras. Un abrazo.
EliminarHa cantado el cisne antes de morir. Ha sido asesinado. Su agresor intenta recomponer las piezas que ahora le faltan. ¿Se trata de un asesino en serie? ¿Cuál es ese fin que, según él, justifica los medios? Se me escapan las elipsis, pero el micro es sugerente.
ResponderEliminarUn beso, Macarena.
Me estáis convenciendo entre todos de la interpretación del micro, ya que veo que ninguno le da el significado que pretendo. Buuaaaa!!
EliminarIntentaré seguir aprendiendo a través de vuestras lecturas. Gracias, Carmen, por tu comentario. Un abrazo.
En defensa propia, tengo que añadir que él no la mató. A la primera por lo menos no...
ResponderEliminarNo sé cómo se las apañará para completar lo que le falta. Al menos la esencia ya la lleva consigo. El caso es que, sea cual sea su intención, el asunto da mala espina.
ResponderEliminarEstupendo relato, Macarena.
Un abrazo y enhorabuena.