Escarbar
La niña reprime un grito cuando encuentra a Barbie, destrozada, en un basurero. Proclama su inocencia, al ser señalada como sospechosa de manipular la escena de un crimen; pero la prueba de ADN confirma que los restos en sus uñas son compatibles con el plástico del cuerpo de la muñeca.
Las modernas pruebas científicas sacan a relucir la verdad que quería ocultarse. Lo que no consiguen los tiempos es cambiar a una sociedad que admira tanto la apariencia externa. Sin necesidad de escarbar demasiado, quizá es posible imaginar a esa niña destrozar y esconder a su muñeca en un acto de impotencia, por ser más agraciada de lo que nunca será ella.
ResponderEliminarUn abrazo, Beto
No entiendo quién ha puesto la múñeca en el basurero... Supongo que es un misterio... La niña destroza la muñeca por eso está su adn y manipula la escena del crimen .. Pero si se sorprende al verla en el basurero ha debido ser otro u otra quién la ha puesto ahí.
ResponderEliminar🤔🤔🤔
Me ha resultado muy anemo Beto Un saludo
¡Vaya con la niña!. Parece que está haciendo prácticas para llevar sus habilidades a otro plano de la humanidad.
ResponderEliminarTu micro esconde intenciones más hondas que las apreciadas a primera vista.
Saludos desde allende los mares, Beto.
Se cansó de tanta perfección, tan delgada, tan bien vestida, y con "de todo". Ya vendrá algún abogado que escarbe y escarbe. Un beso.
ResponderEliminarTécnicas forenses al servicio de un irónico y original relato, donde la manipulación, frialdad y saña de la niña dan escalofríos. Muy bueno, Beto. Un abrazo.
ResponderEliminarEstimados amigos: Ángel, Raquel, María Jesús, Maite, Salvador. Me parece que esta vez no he podido transmitir adecuadamente lo que quiero contar. Por sus generosos comentarios veo que la niña sale mal parada cuando, en realidad, ella es una victima. El que creí sería un micro “normalito” de denuncia, ha resultado ser uno en el que no he podido hacer llegar el mensaje, les pido excusas. Tengo por norma no explicar mis relatos, pero creo que la historia que aquí cuento no es común en países con altos niveles de desarrollo (España, por ejemplo) pero en este lado del atlántico, en países como el mio, es común ver a niños que se buscan la vida escarbando en los basureros y para los que un juguete desechado o roto puede ser un gran tesoro. Como una denuncia al crimen del desamparo de estos niños he escrito estas 50 palabras. Gracias por la amabilidad de sus lecturas y por dejarme sus diferentes interpretaciones.
ResponderEliminarSaludos.
Vaya, Beto, un relato de lo más original con esa policía científica al acecho ha dejado a la víctima sin inocencia y sin su Barbie.
ResponderEliminarUn abrazo.
Amigo Pablo, la niña protagonista de esta historia y mu-chos niños de la realidad, solo quieren que nos acordemos de ellos y les hagamos justicias. Es criminal dejarlos vivir y trabajar entre la basura. Gracias por acercarte hasta mi relatito y dejar tu amable comentario.
EliminarSaludos.