Cuento para despertar
Depositan recetas secretas en el caldero. Bulle. La intensidad del fuego eleva llamas hasta derretir el bronce. La pócima derramada emite efluvios de podredumbre. Millones de narices se protegen esperanzadas tras mascarillas asiáticas con tara de fábrica. Morgana, Sanchezca y Breyana vuelan, carcajeándose, sobre escobas supersónicas por el espacio electoral.
No me gusta la pócima de esas brujas. Es difícil de digerir, pero entre lineas se escapa el veneno que pones en tu intención.
ResponderEliminarMuy bueno.
Bss de los dos.
Querida María Jesús, tu ironía no tiene límites y tu acidez literaria es meritoria de un premio. Llegó el Apocalipsis, arrepentíos de vuestros pecados, las brujas endemoniadas os quemarán vivos en sus calderos. Confesad, malditos corruptos, hijos de Satanás..Todos estos conceptos me vienen a la mente cuando leo este estupendo micro.
ResponderEliminar¡Felicidades por ser tan implacable! Algunos -muchos- se lo merecen.
Recetas milagrosas y promesas vacías que avivan el tufillo de falsedad en el espacio electoral. Original sátira, María Jesús. Un abrazo.
ResponderEliminarUna de brujas nos has traído, en la oleada de tus mujeres llenas de propósitos de mundos futuros. La nueva era, donde se impone el arrepentimiento a los corruptos de cualquier régimen. Una metáfora de lo qué podría ser, y puede qué algún día sea. Un abrazo muy fuerte María Jesús.
ResponderEliminarJosé María, Iñaki, Salvador, Carmen,mi agradecimiento por haberos molestado en la lectura de este micro, a pesar de estar fuera de concurso.
ResponderEliminarDesde Madrid, saludos virtuales a todos
Da igual quién se suba a esas escobas; el caldero es el mismo, al igual que su receta e ingredientes. Lo triste es que todos nosotros, también siempre, somos el festín.
ResponderEliminarÁcido relato, María Jesús, de los que me gustan.
Un abrazo.