Sueño
Soñó que volvían a su casa natal, que la cuidaba. Era todo en su vida. Le dio un beso en la mejilla y le dijo que todo iría bien. Habían sufrido mucho. Sus amigos les esperaban ansiosos. Llegaron. Pero nada era como antes. Despertó sudoroso y quiso morir cuanto antes.
Salir de una pesadilla, percatarse de que solo fue una falsa alarma, alivia. Llegar a pensar que todo es idílico y encontrar un golpe de realidad, desilusiona y de que forma. Los sueños, esas historias ingobernables del subconsciente, pueden ser armas de doble filo. Ese "nada era como antes" entronca el sueño con lo real y no presagia nada bueno para tu protagonista, que de alguna forma se siente enterrado en vida.
ResponderEliminarUn relato que transita de forma suave y casi imperceptible de lo subconsciente a lo real, con un final que golpea.
Un saludo, Iñaki
Se confunde la realidad con el sueño y el sueño con la realidad. Has sabido mantener la atención en vilo, hasta llegar al sentimiento negativo del sudor y de la muerte.
ResponderEliminarImpresiona su lectura, por la crudeza y la conmoción que destila el relato.
Suerte, Iñaki.