Vuelta atrás
Salimos al monte un día de primavera y, cuando regresábamos, ya era invierno. Una gruesa capa de nieve nos impedía avanzar y el frío nos entumecía los músculos. Al sorprendernos la noche, decidimos guarecernos. En la cueva, un hombre semidesnudo, alumbrándose con una antorcha, dibujaba sobre la pared un bisonte.
Mª Luisa, el despliegue de ficción de tu bonito relato se propone torear el tiempo. ¡Olé! Se salta el que discurre necesariamente entre estaciones y osa proyectarse al pasado de los humanos en las cuevas, con el fuego y las pinturas rupestres.
ResponderEliminarEs la demostración del poderío de la imaginación para saltarse límites. Derrota a los grandes condicionantes que amarran la realidad de los humanos: el espacio y el tiempo. Esta vez, en este micro, has elegido sortear uno de ellos, el tiempo.
A mí me ha gustado acompañarte en la aventura literaria tuya.
Un cordial saludo!
Gran relato, Mª Luisa, que puede interpretarse como un juego entre realidad y fantasía. ¿Qué verdad esconde? La cara A, la fantástica, con ese viaje que altera la dimensión temporal, o la cara B, una fina ironía sobre la deriva de la sociedad actual hacia las cavernas.
ResponderEliminarPara ti, un almendro cargado de flores, de las que permanecen primaverales sin vuelta atrás.
Muchas gracias Carmelo y Patricia por vuestros comentarios.Realmente es una ficción, una fantasía mejor, donde el tiempo no existe y he tratado de volver a los orígenes del ser humano, donde la creación formaba parte ya de la vida y la cueva, la caverna era su habitáculo... y... estaremos volviendo hacia ella ???? Dos abrazos.
ResponderEliminar¡Pues menudo día de sorpresas llevan tus protagonistas! Salen en primavera, llegan al invierno y de allí, pasan a la prehistoria. Eso sí que es una excursión en condiciones. Llena de aventuras. Me ha gustado mucho tu fantástico relato. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Aurora. El tiempo no existe en los relatos. ¡Afortunadamente!
ResponderEliminarNos llevas a un viaje mágico en el tiempo y en la Historia, saltándonos las leyes lógicas de la cronología.
ResponderEliminarMuy hermoso, María Luisa. Besos.
Eso es un buen paseo y lo demás tonterías...
ResponderEliminarUn abrazo María Luisa,