Diga...
Estaba solo, entre la tormenta y la tapia que nunca me había atrevido a franquear. Ahora la tentación presionaba más. Sudaba.
—Llama, llama...
—Diga —me contestó una voz de ultratumba—. Te estoy esperando.
En la pantalla salía la fecha exacta en la que había muerto mi amigo. Sentí el frío.
—Llama, llama...
—Diga —me contestó una voz de ultratumba—. Te estoy esperando.
En la pantalla salía la fecha exacta en la que había muerto mi amigo. Sentí el frío.
La llamada a alguien que ya no está entre los vivos solo puede significar que, a pesar de los temores, quien llama desea volver a reencontrarse con el que se fue. La respuesta viene a confirmar que ha llegado el momento, que están en la misma onda. Por si fuera poco, ese "te estoy esperando" y la fecha en el móvil (son muy listos esos chismes) confirman todas las sospechas.
ResponderEliminarUn abrazo y felices fiestas a los dos
SE TRAGTABA DE JUGAR CON EL MIEDO, ANGEL, MUCHAS GRACIAS POR TUS PALABRAS.
EliminarMe pierdo un poco. No sé si la voz de ultratumba, anuncia la muerte del protagonista, la de su amigo, o las dos a la vez.
ResponderEliminarDe todas formas me queda una sensación escalofriante, quizás por el escenario que nos presentas.
Feliz 2019, José María y un abrazo navideño.
Tú, ¿Qué preferirías? Se trataba de jugar con elmiedo, pero te puedo enseñar el mensaje…
EliminarGracias por tus palabras. un abrazo de los dos.
Da un poco de miedito tu micro de este mes, José María. Si la voz del amigo es real, le está señalando la proximidad de su propia muerte, pero la mente humana es muy compleja y puede creer oír la voz de alguien ya desaparecido. En fin, que lo pille confesado.
ResponderEliminarUn Feliz 2019 y un fuerte abrazo.
Carmen yo prefiero escuchar otra vez el mensaje, que no preguntarle a quien señala.
ResponderEliminarEs jugar con el miedo, jugar con fuego. Muchas gracias por tus palabras. Un abrazo de los dos.