Miedo
Terminará la función, como siempre, sin haber empezado. Convencía fácilmente a la audiencia con su labia; era voraz con el acento; como moderador sabía mediar ante cualquier conato de boicot, de aquellos que no comulgan con la doctrina que va imponiéndose por decreto. Hoy, como siempre, después no habrá sesión.
Lo que termina sin haber empezado. Muy interesante, Antonio. Sucede mucho.
ResponderEliminarY está tb. lo que no se sabe en qué momento empezó, debió de empezar en algún momento, se supone, pero que no acaba,que no hay manera, no hay tu tía. Y harta.
Los discos rayados y aquellos discursos políticos del difunto antiguo presidente de Cuba, son bonitos ejemplos. Es la palabrería desatada, el blablabla que arde en ideales vaporosos, desahogos verbales, propuestas huecas y falsas promesas. Puro cacareo interminable.
Un saludo, Antonio!
La politica, los politicos, la politiqueria, la poliblabla... en fin y no se aprende. Gracias por tu comentario. Antonio
EliminarLa mayoría de los políticos son expertos en palabras vacías, en vender humo. Hasta no hace mucho, con poco, convencían a las masas, en general más ignorantes que ahora. Hoy día, ante audiencias descreídas y cansadas, resulta más difícil vender su supuesto altruismo en busca del apoyo que precisan. Es algo que sucede en sociedades democráticas, forma parte del juego político. Pero también en las autoritarias, cuyos líderes tratan de convencer y justificarse, obviando que la aparente lealtad que obtienen solo es fruto de esa palabra que da título al relato. Malo lo uno, peor lo otro. En medio de todo, mucha gente hastiada de líderes vacíos y engañosos.
ResponderEliminarUn abrazo, Antonio.
!Cuanta razon tienes Angel!. Saludos y que el anho que viene sea de lo mejor. Gracias por el comentario. Antonio
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